Pulir abrillantar hormigón

El pulido y abrillantado de suelos hormigón le permitirá obtener en poco precio un suelo con acabado  liso uniforme y brillante a partir de un pulir un hormigón corriente como el que se encuentra en su garaje.


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El hormigón pulido es tendencia

Cada vez son más los arquitectos e interioristas que optan por un acabado de hormigón pulido en sus proyectos.

El hormigón pulido y abrillantado se puede utilizar como suelo para una obra nueva o para pulir un suelo ya existente. Obtendrá un suelo, brillante, duradero, uniforme y sin juntas.
El hormigón resulta muy común y versátil en la construcción, como elemento estructural o pavimento previo a un suelo acabado.

La ventaja de pulir y abrillantar el hormigón es su bajo coste respecto a los revestimientos de suelos habituales, ya que no hay que invertir en un material adicional como pasa en baldosas o parqué, que normalmente se aplican sobre el hormigón. En el caso de pulir, el mismo hormigón será el suelo final, reduciendo costes

¿Es lo mismo hormigón pulido que el hormigón fratasado?

El hormigón fratasado es un proceso con en el que se usa una fratasadora de hormigón o helicóptero que se aplica mientras el hormigón esta fraguando para obtener una superficie dura, regular y rugosa.

Nuestro pulido de hormigón es un proceso que se aplica sobre un hormigón existente o nuevo, ya sea fratasado o regleado. Se rebaja y se pule en seco y se abrillanta  para obtener un suelo completamente liso, uniforme y brillante, dejando el árido a la vista como si de un terrazo se tratase.

Para aplicarlo en obra nueva, consúltenos antes de realizar el pavimento y le asesoraremos para obtener unos resultados óptimos de dureza y grano.

Tres grados de pulido de suelos de hormigón

Existen distintos grados de pulido de hormigón, según sus necesidades.
Estos grados sumados van otorgando un acabado cada vez mejor al pavimento, hasta resultar en un suelo, a primera vista, parecido al terrazo abrillantado, pero de prestaciones superiores.

1r grado: Pulido y rebaje general:
Ideal para garajes o zonas donde se quiere eliminar la rugosidad típica del hormigón «regleado» o fratasado con helicóptero.
Pulido con diamante que proporciona al suelo un acabado de planimetría perfecta con una superficie mate y rallada.

2º grado: Preparación para hidrofugante, barniz o pintura.
Pulido con resinas adiamantadas. Proceso mínimo en el que se obtiene una perfecta planimetría del suelo de hormigón sin rallas y un acabado pulido del árido que contiene el hormigón.

3r grado: Cristalizado y abrillantado
Pulido con 3 diamantes finos. Se borran imperfecciones del suelo, se aplican endurecedor, resinas de brillo, sales, cristalizador y cera.
El resultado es un perfecto abrillantado sin juntas. Calidad superior a la de cualquier terrazo o mármol.


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